Cookie Consent by FreePrivacyPolicy.com El Parlamento Europeo rechaza el Corredor Central de alta velocidad

Portada:  Noticia de actualidad


Tanto PP como PSOE pretendían incluir el corredor ferroviario central en el mapa básico de la Red Transeuropea de Transportes que garantiza el acceso a la financiación de los proyectos

Las comisiones de Transportes e Industria del Parlamento Europeo dieron la espalda a las enmiendas que apostaban por el túnel a través de los Pirineos y aprobaron por amplia mayoría –81 votos a favor, ocho en contra y cinco abstenciones– el mapa propuesto por la Comisión Europea y avalado en marzo pasado por los ministros de transportes de los veintisiete, que solo mantiene al Corredor Mediterráneo y al Atlántico como ejes prioritarios de la Unión Europea.


El Parlamento Europeo rechaza el  Corredor Central de alta velocidad
 
 
 

(20/12/2012) A lo único que accedieron ayer los europarlamentarios fue a incluir la posibilidad de financiar a partir de 2014, con cargo al nuevo marco presupuestario, los estudios de viabilidad del túnel. Un proyecto, que según admitió la eurodiputada socialista Inés Ayala, solo se llevará a la práctica si existe voluntad también en Francia. El informe aprobado, que quiere priorizar áreas con una “necesidad urgente” de desarrollo, incluye una docena de corredores prioritarios, entre ellos el Atlántico, que conectará el País Vasco con Europa.

Financiación y valor añadido

Los proyectos susceptibles de obtener financiación europea serán seleccionados anualmente con criterios que tendrán en cuenta la madurez y el valor añadido para la Unión, con especial atención a la eliminación de cuellos de botella y los pasos transfronterizos.

Cuando el comisario de Transportes, Siim Kallas, definió en octubre del año pasado el mapa prioritario para la Unión Europea, lo hizo pensando no sólo en el apoyo de las capitales europeas, que son quienes deben seguir aportando el grueso de la financiación, sino en la madurez de los proyectos, con vistas a que la red central esté en marcha para el año 2030. Una vez reciba luz verde del pleno de la Eurocámara, a comienzos de 2013, arrancará la negociación con el Consejo.

Aún queda por determinar de cuánto dinero se dispondrá entre 2014 y 2020 para financiar proyectos de redes transeuropeas. Han sido varios los eurodiputados que advirtieron a los gobiernos que si el tijeretazo es demasiado elevado habrá que replantearse la negociación.