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Enviar por emailEl portal youtube, entre sus millones de videos colgados, tiene también su espacio dedicado a videos sobre el ferrocarril. Se han selecionado aquí diez videos divertidos, sorprendentes, impactantes, del ferrocarril en diversas partes del mundo. Estos videos pueden reflejar situciones cotidianas en sus paises respectivos, realidades absolutamente impactantes si lo comparamos con la cotidianidad de nuestros ferrocarriles. Es simplemente una pequeña pincelada diferente para contrastar la diaria realidad ferroviaria que puntualmente recoge Vía Libre en este portal.
(29/07/2011)
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Mercado ferroviario Bangkok
No hablamos aquí de una feria de locomotoras o un mercadillo de miniaturas ferroviarias. Se trata de uno de los trazados quizás más conocidos del ferrocarril mundial gracias a internet. En el denso mosaico de las calles de Bangkok no sobra el espacio, y el pasillo ferroviario de una línea no demasiado transitada no es un mal lugar para montar un mercado de frutas y hortalizas. El único problema es que de cuando en cuando, ¡vaya por Dios!, pasa un automotor diesel. Todo está preparado para que, pocos minutos antes de la llegada del tren, los toldos que cubren la mercancía se plieguen. Las mercancías más próximas a la vía están dispuestas de tal manera que se ajustas escrupulosamente el gálibo ferroviario. Una vez pasado el convoy, ni siquiera a distancia de bloqueo, todo se recompone de tal manera que cuesta imaginar que por ahí pasara un tren. Incluso la entrevía está cubierta con tablones para facilitar el tránsito. Este video es uno más de las decenas que hay en la red sobre este impresionante lugar. Éste es especialmente completo porque incluye imágenes desde diversos planos, incluso desde el propio tren.
En Birmania, en las afueras de Rangun, el concepto de parada del tren es relativo. En los países desarrollados son bien conocidos los sistemas “people mover”, en los que los viajeros suben en marcha a los trenes para ciertos servicios muy corta distancia. Este sistema ha sido aplicado, de una forma muy peculiar, por los birmanos en aquellos casos en los que un tren no para en una estación. Una estrategia coordinada, con ayuda de los viajeros que van a bordo del tren, permite estas temerarias acrobacias ferroviarias. Una de “cine cómico” Entre las escenas ferroviarias del cine mudo, hay una larga y divertidísima secuencia de una película dirigida y protagonizada por Buster Keaton en 1923. Keaton tenía una innegable pasión por los trenes, y en esta película, basada en una pelea entre clanes y una historia de amor, sitúa la historia en 1830 y pone a circular una máquina similar a la Rocket de Stephenson, por una vía imposible pero que el tren, mal que bien, recorre. En esta película trabajó el padre y el hijo de Keaton, además de su propia esposa embarazada de otro hijo. Nueve minutos y medio absolutamente deliciosos. Trenes por la calles : Tampa, Florida
Supertren en las calles de Salem, Oregon
Este tren impresiona no sólo por el espacio urbano que cruza, sino por su infinita longitud, sus seis locomotoras diesel traccionando y la espectacular colección de vagones de todo tipo que remolca. Son doce minutos de video de los cuales nueve corresponden al paso de este infinito mercante Un cercanías reconvertido en tranvía en Kyoto, Japón
Si sorprendente es ver un tren mercante por en medio de las calles, en Japón rizan el rizo. En la populosa ciudad de Kyoto la línea Hamaotsu – Kamisakaemachi, la Keihan Kyotsu Line, atraviesa las calles como si fuera un vehículo más. Y desde luego no es un tranvía. No hay más que ver la complejísima catenaria bifilar, de ferrocarril pesado, que cruza la calle mediante complejos pórticos tipo estación. El tren, un tren normal, se para en los semáforos y se ajusta al tráfico. Sólo una potente sonería avisa cuando las vías giran e interceptan la calle, para avisar a los demás conductores. El record del tren del Circo Ringling
El famoso circo americano Ringling Bros and Barnum & Bailey Circus tiene a gala mantener esa tradición tan propia del circo yanki de hacer sus viajes en tren. Sus trenes son en si mismo ya un espectáculo. Para homenajear al patrimonio ferroviario norteamericano, este famoso circo hizo remolcar su larguísimo tren por una locomotora de vapor Challenger de la Unión Pacific. La locomotora 3985 tuvo el honor de llevar el tren de vapor más largo del siglo XXI. 65 coches iban detrás de la esforzada locomotora, formando un inmenso convoy de 1.859 metros y 6.000 toneladas de peso. Coches de viajeros, furgones y plataformas que llevaban a su vez todo tipo de vehículos. Un espectacular tren que fue seguido por decenas de aficionados americanos en su recorrido desde Speer a Denver. En el video se ve el apurado paso de la locomotora remolcando este espectacular, nunca mejor dicho, tren. El lazo del Teachapi
Cuando en España nos estamos devanando los sesos para conseguir los trenes de 750 metros es normal que nos quedemos helados viendo este tren en semejante sitio. El convoy es un “modesto” tren de siete locomotoras y unos 111 vagones, que debe andar por los dos kilómetros largos de longitud de composición. El paraje es espectacular. El lazo de Tehachapi permite ver a estos monstruos del rail en tres planos diferentes, ya que la vía se cruza sobre si misma para ganar cota en un paso topográfico complicado. Este lugar ha sido declarado patrimonio de los Estados Unidos y es la meca de los aficionados al ferrocarril. Siete minutos y medio de impresionante ferrocarril. El funicular más empinado del mundo
Con un 106,6 por ciento de pendiente, el funicular suizo de Gelmer pasa por ser el más empinado del mundo. Las sensaciones en su descenso casi se igualan a las de una montaña rusa, eso si, lejos de las velocidades de esos endiablados trenes de los parques de atracciones. Está situado en pleno corazón de Suiza, a unos 80 kilómetros, a vuelo de pájaro, de la capital helvética. El ir más despacito, además de asegurar la vida de los viajeros, permite disfrutar plenamente de unos paisajes espectaculares. Este funicular es fruto de la adaptación al uso turístico de un antiguo remonte usado para la construcción del Embalse de Gelmer. El video, de diez minutos de duración, se inicia con imágenes desde fuera del funicular y con planos muy interesantes de sus motores. A partir del minuto tres el cámara se introduce en el funicular para descender al fondo del valle y, ¡agárrense al asiento!, porque incluso ante el monitor es posible sufrir un ataque de vértigo.
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