(10/03/2010) Originalmente, el plan preveía una inversión de más unos 10.259 millones de euros en los próximos veinte años, cifra que se recortó a petición del Ministerio de Economía.
Aparte de la inversión aprobada, se asignarán más de 3.440 millones de euros al desarrollo de la red ferroviaria durante los próximos diez años, aunque habrá otras obras que se aplazarán para después de 2020.

El elemento más importante de la primera fase es electrificación de las líneas existentes que parten de Tel Aviv, prevista desde hace muchos años, y la adquisición de material rodante eléctrico, todo lo cual representa unos 2.125 millones de euros.

Tiempos de viaje

Otros proyectos incluyen la nueva línea de veintitrés kilómetros Acre-Carmiel, en la Baja Galilea, y la recuperación de la anterior línea del ferrocarril de Hedjaz, entre Haifa, Afula y Beit-Shean, de la que se prevé comiencen las obras en 2011. Estos proyectos se elevarán a unos 659 millones de euros cada uno.

Según Katz, los tiempos de viaje objetivo para las nuevas líneas es de 32 minutos para los 44 kilómetros que separan Carmiel y Haifa; y 92 minutos para los trenes rápidos que cubren los 136 kilómetros entre Carmiel y Tel Aviv o 117 minutos con paradas intermedias. Entre Beit-Shean y Tel Aviv, los trenes rápidos tardarían 102 minutos, y 127 minutos con paradas.

Mercancías

Durante la primera fase, se realizarán los trabajos de planificación de la abandonada línea “Este”, que se quiere recuperar, y que conecta Kfar-Sava y Hadera Este, incluido el desdoblamiento y realineamiento del enlace exclusivo de mercancías entre Lod y Rosh-Ha-Ayin Sur. También se iniciarán los trabajos de planificación para añadir una cuarta vía al demandado corredor transversal Ayalon, entre Haghana y las estaciones de la Universidad de Tel Aviv.


Segunda fase

Estas obras se acometerían durante la segunda fase, para la que aún no existe financiación. En esta fase podría incluso incluirse en el corredor ferroviario de larga distancia a Eilat, ampliación de la línea Este, que discurre en paralelo a la Autopista 6; y la ampliación de la línea Carmiel a Kiryatk Shmona, en la Alta Galilea.

Al parecer, Netanhayu ha dado instrucciones al Ministerio de Transportes y a los Ferrocarriles de Israel para que comiencen el estudio de diseño detallado de las líneas a Eilat y Kiryat Shmona.