(18/04/2024)  

Como parte de un plan de inversión de ochenta millones de euros para 2022-24 que cubre obras en la terminal francesa y su gemela más pequeña en Folkestone en el Reino Unido, el proyecto implica la construcción de edificios dedicados al prerregistro y la instalación de quioscos para controles biométricos de conductores y pasajeros de vehículos de carretera. 

El edificio de preinscripción francés y las obras civiles asociadas ya están terminados y se espera que los quioscos biométricos estén terminados a principios de mayo. En la terminal de Folkestone, se prevé que las obras civiles para adaptar el lugar a los controles del Sistema de Entrada y Salida estén terminadas a tiempo para la instalación de los quioscos biométricos en julio.

Los quioscos suministrados por el fabricante francés IN Groupe están diseñados específicamente para pasajeros de automóviles y se instalarán un total de 224 quioscos en las dos terminales. Las pruebas realizadas por Eurotunnel con cuatro equipos y 180 pasajeros voluntarios sugirieron que el equipo biométrico era fácil de usar, rápido y de última generación. El modelo operativo de Eurotunnel se diseñó utilizando un gemelo digital para simular los flujos de pasajeros durante los períodos pico con hasta 2 000 pasajeros o 700 vehículos por hora.

Cubierta de 7.000 metros cuadrados

La terminal de Coquelles dispone ahora de una zona de paso cubierta de 7.000 metros cuadrados para las salidas de la Unión Europea de nacionales de terceros países. Ha sido diseñado para albergar sesenta vehículos de pasajeros simultáneamente.

Cada una de las terminales de vehículos contará con dos quioscos estáticos donde los pasajeros extracomunitarios se someterán a controles biométricos faciales y de huellas dactilares; Los dos quioscos están destinados a permitir el procesamiento rápido de todos los pasajeros en cada vagón.

Una vez que el sistema haya capturado los datos iniciales del pasajero en la base de datos de la Unión Europea, el proceso de verificación para cruces posteriores será más rápido ya que el pasajero solo necesitará someterse a un reconocimiento facial sin necesidad de responder más preguntas. Se habilitarán carriles separados para los vehículos con pasajeros que ya se hayan matriculado y los que no se hayan matriculado previamente.

El registro de entrada en la Unión Europea para ciudadanos extracomunitarios tendrá una validez de tres años y se ampliará tres años cada vez que un viajero entre en la Unión Europea. Sólo se les exigirá que se vuelvan a registrar si no han cruzado una frontera de la Unión Europea en un plazo de tres años.