Cookie Consent by FreePrivacyPolicy.com En servicio el Talgo de ancho variable Moscú-Berlín

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Acorta en cuatro horas y media el tiempo de viaje entre las dos capitales

El pasado sábado 17 de diciembre, los Ferrocarriles Rusos, RZD (Rossiyskie Zheleznye Dorogi) pusieron en servicio el tren nocturno Moscú – Berlín, servido por material Talgo de ancho variable.


En servicio el Talgo de ancho variable Moscú-Berlín
 
 
 

(19/12/2016)  

El acto de inauguración contó con la presencia del Ministro de Transportes de Rusia, Maxim Sokolov; el Presidente de los Ferrocarriles Rusos RZD, Oleg Beloziorov; el Director General de FPK Piotr Ivanov, el Ministro de Fomento español, Íñigo de la Serna; el secretario de Estado de Infraestructuras, Transportes y Vivienda, Julio Gómez-Pomar; el Alto Comisionado de la Marca España, Carlos Espinosa de los Monteros y el presidente y el director general de Talgo, Carlos Palacio Oriol y Segundo Vallejo.

El nuevo servicio que cubre el trayecto en veinte horas y catorce minutos, acortando en más de cuatro horas y media el tiempo de viaje entre las dos capitales, cruza cuatro países circulando por vías de dos anchos diferentes, 1.520 y 1.435 milímetros, sin necesidad de realizar transbordos.

RZD comercializa el servicio con la marca “Strizh”, Vencejo, una denominación que sigue la costumbre de la empresa de bautizar sus trenes con nombres de especies de pájaros. Los números de tren asignados por RZD son el 13 para el Moscú-Berlín y el 14 para el Berlín-Moscú.

Los trenes Talgo operados por RZD salen de la estación de Moscú-Kurskaya y llegan a la de Berlín-Ostbahnhof, tras cruzar tres fronteras, la ruso-bielorrusa, la bielorruso-polaca y la polaco-alemana y realizar paradas intermedias en Smolensko, Krasnoe, Orsha, Minsk, Brest, Bug, Terespol, Varsovia, Poznan, Rzepin y Frankfurt del Oder.

Inicialmente el servicio se realizará con salidas los sábados y domingos desde Moscú, y los domingos y los lunes desde Berlín. El grueso del mantenimiento de las unidades se realiza en Moscú y, en menor medida, en Berlín.

Cambio de ancho

El tren cambia de ancho automáticamente a su paso por la instalación que, a tal efecto, se ha construido en la ciudad bielorrusa de Brest (Ver noticia). El proceso apenas necesita dos minutos por tren, frente a las dos horas que eran necesarias para cambiar los bogies.

Entre Moscú y Brest las locomotoras rusas son las encargadas de dar tracción a los trenes sobre las vías de ancho ruso. A partir de Brest y hasta Berlín, sobre vías de ancho estándar, la tracción la dan locomotoras de la operadora polaca PKP

Además del ahorro de tiempo de viaje por el cambio automático de ancho, el sistema de pendulación natural de los trenes permite aumentar hasta un 25 por ciento la velocidad a la que se circula en las curvas sin necesidad de invertir en infraestructuras

Características

Los trenes, certificados por las administraciones de las cuatro redes por las que circulan, pueden alcanzar una velocidad máxima de 200 km/h. Cuentan con dieciocho coches para viajeros –cinco de primera clase con suites dormitorio con baño incluido, cuatro de primera clase con literas, un coche restaurante, otro cafetería, dos coches de primera con butacas y cinco de segunda con compartimentos de camas- y dos coches técnicos en los extremos de la composición.

La capacidad total de la composición es de 216 viajeros y el precio del billete más barato para un adulto en el recorrido Moscú-Berlín es de 130 euros.

 

Sistemas específicos

Los trenes han sido equipados con un nuevo sistema, desarrollado íntegramente por ingenieros españoles y rusos de Talgo, que impide que ejes y rodales se congelen, gracias a que reutiliza el aire caliente que la ventilación elimina de los compartimentos de viajeros para dirigirlo a la rodadura, evitando la congelación con un mínimo consumo de  energía.

Para poder circular a velocidad alta en Alemania, los trenes están equipados con un sistema de frenado mediante patín electromagnético que consiste en una barra de metal que se adhiere al carril tras ser energizada y que ayuda a reducir la velocidad mediante la fricción entre ambos.

El sistema de cambio de ancho de Tago que funciona desde hace décadas en España para pasar del ancho de vía estándar al ibérico y viceversa, es la primera vez que se explota comercialmente fuera de nuestras fronteras.

El sitema cuenta con tres mecanismos: unos soportes laterales en los que se apoya el tren, de manera que las ruedas dejan de soportar su peso, unas guías verticales que se encargan de activar los cerrojos de los rodales para desbloquearlos y unas guías horizontales que empujan las ruedas a la posición del nuevo ancho de vía.

Los tres mecanismos actúan sucesivamente. En primer lugar, las ruedas dejan de soportar el peso del tren, tras lo que se produce el desbloqueo de los cerrojos, y se cambia el ancho. Inmediatamente, se bloquean los cerrojos, y las ruedas vuelven a soportar el peso del tren.

Más información sobre el servicio Moscú-Berlín en el próximo número de enero de la versión impresa de Vía Libre