Cookie Consent by FreePrivacyPolicy.com Una estación victoriana londinense cubierta con 4.400 placas solares

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Situada sobre un antiguo puente del Támesis en Londres

Sobre el río Támesis un viejo puente ferroviario victoriano construido en 1886 se prepara para una profunda metamorfosis. La antigua pasarela de San Paul se convertirá para 2012 en la flamante estación de Blackfairs, un icono de estructura sostenible en el corazón de Londres. Este puente de la época dorada de los ferrocarriles británicos con la Reina Victoria funcionó como estación de mercancías desde los inicios. A partir de 1970 se utilizó como terminal de tren y metro hasta que cerró en 2009 para iniciar los trabajos de su nueva transformación.


Una estación victoriana londinense cubierta con 4.400 placas solares
 
 
 

(14/10/2011) A principios del mes de octubre comenzó la instalación de más de 4.400 placas fotovoltaicas que se situarán sobre un techo nuevo, añadido a la estructura histórica, que ocuparán 6.000 metros cuadrados. Será la segundo puente solar que ve la luz en el planeta. El pionero se encuentra en Brisbane, Australia y fue construido en 2009. Pero la energía solar pisa fuerte sobre los caminos de hierro y hace pocos meses que 16.000 paneles solares fueron situados sobre el túnel de una línea de tren en Bélgica. Esta instalación es capaz de dar energía a todos los trenes de el país durante un día al año.

El director del proyecto, Lindsay Vamplew, está seguro de que esta gran reforma convertirá a la estación de Blackfairs en un ejemplo de terminal sostenible para todo el mundo. “El puente de ferrocarril victoriano en Blackfriars es parte de nuestra historia ferroviaria. hspace=10Construido en la época del vapor, lo estamos poniendo al día con la tecnología solar del siglo veinte. Será una estación emblemática para la ciudad”, ha asegurado.

Los paneles le han costado a Network Rail, la empresa operadora de trenes en Reino Unido, 7,3 millones de libras (unos 8,3 millones de euros) y forma parte de la inversión de la empresa para reducir en un 25 por ciento de sus emisiones por pasajero en 2020.

El proyecto se enmarca dentro de un megaproyecto llamado Thameslink que costará 5.500 millones de libras (más de 6.300 millones de euros). La iniciativa pretende hacer circular más trenes por la vía que va de Bedford a Brighton a través de Londres. Una vez finalizada, hasta veinticuatro trenes diarios podrán correr en la sección central de la ruta en Londres.

Los paneles solares generarán una cantidad estimada de 900.000 kWh de electricidad al año, lo que aportará el 50 por ciento de la energía de la estación y reducirá las emisiones de dióxidode carbono en una cantidad estimada en 511 toneladas por año. Además de los paneles de energía solar, otras medidas de ahorro incluyen los sistemas de recolección de la lluvia y los tubos de sol para obtener iluminación natural.

“Estamos creando una estación amplia y moderna y la entrega de un servicio de tren muy mejorado para los pasajeros, al mismo tiempo que la instalación de grandes paneles solares para hacer de Blackfriars la terminal más respetuosa con del medio ambiente”, ha asegurado Lindsay Vamplew.