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Enviar por email(14/04/2005) style=text-align: justify>
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Fabricados por Alstom son una modernización de los trenes 3900 Nueva serie 4300 de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana adjudicó a Alstom un contrato para el suministro de diez trenes de cuatro coches cada uno para el metro de Valencia: las nuevas unidades se incorporarán al parque de FGV como serie 4300 y presentan algunas mejoras con respecto a la 3900 en la que se basan.
La nueva serie que se denominará 4300, estará compuesta por vehículos iguales en lo esencial a los de la serie 3900, con el nuevo coche remolque intermedio ya incorporado y con una actualización de algunos equipos y prestaciones. Además las modificaciones o mejoras que se han ido incorporando a lo largo de los años en la serie 3900 se incorporan de origen en esta nueva serie. Desde el punto de vista estético, en período de definición todavía, en líneas generales se mantiene el diseño de la anterior serie sin perder las características que identifican a ambas pero incorporando algunos detalles que dotarán a las 4300 de personalidad propia y subrayarán su modernidad y mayores avances tecnológicos. En lo que se refiere al equipamiento, las unidades contarán con un nuevo equipo de tracción con semiconductores IGBT, nuevos motores más potentes para aumentar las prestaciones de la composición actual y un nuevo equipo de control “Agate” de 32 bits. Las unidades dispondrán pues de una mayor potencia y mejorarán su aceleración por encima de 1m/sg2, cuando las unidades 3900 consiguen como máximo 0,85 m/sg2. Asimismo, las unidades de la serie 4300 contarán con Red TCN, con tecnología de buses de comunicación en sustitución de la lógica de relés actual. Además incorporarán equipos de Frenado Automático Puntual (FAP) para su uso en la línea 1, además del sistema ATP. Otras de las novedades serán el nuevo equipo de vídeovigilancia con ocho cámaras repartidas por el departamento de viajeros para aumentar la seguridad de los viajeros y reducir el vandalismo, la preinstalación para un equipo de detección de incendios y las mejoras en el aislamiento acústico de los coches. 3900 Las unidades de la serie 3900 en las que se basan esta nueva serie 4300 comenzaron a prestar servicio en la línea 3 del Metro de Valencia coincidiendo con su inauguración en mayo de 1995. Fueron fabricadas en 1995 por Meinfesa, entonces empresa del Grupo GEC Alsthom. El contrato que preveía la construcción de un 80 por ciento del pedido en la Comunidad Valenciana, había sido adjudicado en marzo 1993, por un importe de 8.225 millones de pesetas en los que se incluía el mantenimiento del parque por un año. El plazo de entrega para la primera unidas era de 22 meses y la entrega de la mitad del pedido -nueve unidades- destinadas a la línea 3, antes de mayo del 95. Las restantes se entregarán tres meses después. Las unidades, de diseño simple y sencillo, estaban basadas en el modelo MP-89 que desde 1980, circula en la red metropolitana de París, y de las que una segunda generación se comenzó a construir en 1988. Se trataba de trenes de tres coches, dos motores y un remolque intermedio en composición M-R-M.
Seis años después de su incorporación el parque de FGV, en de abril de 2001, Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana firmó con Alstom el contrato para la fabricación y suministro de 18 coches intermedios para las unidades de la serie 3900. Con ellos, a partir de noviembre del mismo año, los 18 trenes tuvieron una composición M-R-R-M.
Su longitud es de 14.500 milímetros que se suman a los 45.000 de las unidades de tres coches para formar las nuevas composiciones, junto con un pasillo de intercomunicación de 750 milímetros de modo que la unidad M-R-R-M tiene una longitud total de sesenta metros y 250 mm. La altura máxima de cada coche es de tres metros y 90 centímetros. El empate del bogie es de 2,19 metros, su diámetro de rueda de 860 mm y la disposición del bogie BB. Disponen en cada costado con tres puertas de 1,2 metros de paso libre y de 1,9 metros de altura. Doble composición Las unidades 3.900 que desarrollan una velocidad de 80 kilómetros por hora, cuentan con ocho motores asíncronos trifásicos, lo que supone una potencia nominal de 1.312 kW, y altos niveles de aceleración y frenado, como corresponde a los servicios de metro. Cada tren dispone de sistema de ayuda a la conducción de velocidad prefijada y puede circular en doble composición de modo que con la incorporación de los nuevos remolques se pueden poner en servicio dobles unidades de ocho coches. Las cajas de los vehículos son de acero inoxidable y la existencia de amplios pasillos de intercomunicación ofrecen un interior completamente diáfano a todo lo largo del tren, disposición que se mantuvo con la incorporación de los nuevos coches intermedios. Las plazas para viajeros de movilidad reducida están situadas en los coches motores, concretamente junto a las dos puertas de acceso de que disponen en cada costado. Los equipos de freno son Knorr y los de aire acondicionado de Stone Ibérica (actualmente MERAK), mientras los convertidores estáticos de potencia y el sistema integrado de información la viajero y registro de cada tren, denominado Iris, es de Sepsa. En los coches motores, los bogies cuentan con dos motores de tracción, uno en cada eje y tanto la suspensión primaria como la secundaria son neumáticas. |
El contrato de suministro de las diez unidades alcanza un valor de 60 millones de euros y los trenes, destinados a las Líneas 1, 3 y 5 del Metro de Valencia, serán construidos en la planta de Albuixec, recién vendida por Alstom a Vossloh. El comienzo de las entregas se prevé para el año 2006.
Los nuevos coches eran iguales a los suministrados en el anterior proyecto, salvo por la eliminación de algunos equipos y por la incorporación de las modificaciones y mejoras realizadas en los coches existentes durante sus años de servicio.