(13/02/2023)  

Esta obra, que implica soterrar 5,1 kilómetros de la R2 y la R4 y construir una estación intermodal en La Torrassa, es una actuación estratégica para el futuro de la red de cercanías en Cataluña, ya que supondrá una transformación ferroviaria y urbana, y permitirá eliminar barreras, mejorar la seguridad y la movilidad activa.

Actualmente en fase de proyecto, el soterramiento ferroviario en Hospitalet de Llobregat, la segunda ciudad más poblada de Cataluña, será una de las actuaciones más complejas que se acometan en la región en los próximos años, ya que se ejecutará en un entorno densamente urbanizado, con la coexistencia de dos líneas ferroviarias, una elevada densidad de tráfico y diversas infraestructuras y servicios.

Diferentes modelos de explotación

La actuación constituye una de las obras más ambiciosas del plan "Transformem Rodalies", que cambiará la explotación ferroviaria y el entorno urbano del municipio, promoverá infraestructuras sostenibles y potenciará la multimodalidad con otros modos de transporte. La actuación garantizará la permeabilidad de la infraestructura ferroviaria y su integración en la trama urbana, eliminado la barrera que representa el actual trazado en superficie.

Estas nuevas infraestructuras incluyen la implantación de una conexión articulada o rótula, con la que aumentará la funcionalidad y disponibilidad de las vías, permitiendo la implantación de diferentes modelos de explotación sin necesidad de realizar inversiones adicionales, en caso de modificación del sistema, costa-costa, o costa-montaña. De esta forma, la vía directa que se prevé para trenes regionales podrá conectar, tanto con el túnel de Plaça de Catalunya, como con el de Passeig de Gràcia en Sants.

Asimismo, se incrementará la funcionalidad en el acceso a la estación de Hospitalet de Llobregat mediante la construcción de un salto del carnero, que agilizará los movimientos de entrada y salida de la estación, evitando los cruces de vías al mismo nivel o cizallamientos, reduciendo así los tiempos de espera para las circulaciones.

Gran intercambiador del sur de Barcelona

Para la integración del ferrocarril en la ciudad, salida natural desde Barcelona hacia el sur, se soterrarán 5,1 kilómetros de vías de las líneas Barcelona-Vilanova i la Geltrú-Sant Vicenç de Calders y Barcelona-Vilafranca del Penedès-Sant Vicenç de Calders.

Las nuevas infraestructuras incluirán la construcción del gran intercambiador del sur de Barcelona -la nueva estación de La Torrassa- que facilitará la conexión entre las líneas de Vilafranca y de Vilanova entre sí y con las líneas 1, 9 y 10 de Metro. La nueva estación quedará integrada en la urbanización del futuro tramo soterrado y será accesible, luminosa y eficiente energéticamente. Dispondrá de varios niveles, que permitirán la interconexión entre los diferentes modos de transporte, ofreciendo alternativas de movilidad sostenible y segura.

Esta actuación, esencial para la configuración de los futuros esquemas de explotación en el entorno de Barcelona y su área metropolitana, potenciarán la intermodalidad y la racionalización de la explotación ferroviaria.

Estación de Bellvitge

Por su parte, la estación de Bellvitge verá modificada su estructura, ya que se prevé integrarla también en el nuevo parque lineal, mediante la construcción de una terminal subterránea con dos niveles, accesible y con grandes lucernarios, que proporcionarán luz natural a las instalaciones y contribuirán al ahorro energético. La urbanización del espacio liberado por el cubrimiento del ferrocarril permitirá la creación de un jardín lineal, que dará continuidad a la cubierta del actual cajón de entrada a Sants, mejorando la permeabilidad transversal de los barrios de Bellvitge, Gornal, Centre, Sant Josep, Les Planes, La Torrassa y Santa Eulàlia.

La integración del ferrocarril en Hospitalet requerirá la utilización de diferentes métodos de excavación, el desarrollo de múltiples infraestructuras y la realización de soluciones técnicas de vanguardia, que se estudian de forma exhaustiva y consensuada. Entre ellas, destacan los tramos soterrados bajo las trazas de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC), la línea de alta velocidad y las líneas 1 y 9 de Metro. A éstas, se añaden las obras de reposición de cinco colectores, dos de ellos situados en el sector de La Torrassa y los otros en el área de Bellvitge.