Cookie Consent by FreePrivacyPolicy.com Renfe realizará en diciembre la primera prueba de tracción ferroviaria con gas natural licuado de Europa

Material:  Noticia de actualidad


Con un tren autopropulsado del parque diésel de Feve (2600), en entre las estaciones asturianas de Trubia y Baiña

Renfe, en colaboración con Gas Natural Fenosa y Enagás, prepara para la primera quincena de diciembre la que será la primera prueba piloto de tracción ferroviaria con gas natural licuado (GNL) de Europa y la primera en el mundo en el sector ferroviario de viajeros. El objetivo de la misma es verificar la viabilidad de una solución con potenciales ventajas ambientales y económicas para los tráficos que se desarrollan actualmente con tracción diésel.


Renfe realizará en diciembre la primera prueba de tracción ferroviaria con gas natural licuado de Europa
 
 
 

(16/11/2017) Este proyecto de innovación, presentado el pasado martes por el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, analizará la viabilidad de la adaptación de vehículos ferroviarios para su funcionamiento con motores y depósitos de GNL y el correspondiente análisis técnico, legal, económico y ambiental para la red ferroviaria española y europea.

El proyecto se enmarca en la Estrategia de impulso del Vehículo con Energías Alternativas en España 2014-2020, en línea con el objeto y ámbito de aplicación de la Directiva 2014/94 sobre la implantación de una infraestructura para los combustibles alternativos en Europa. Además, forma parte también del plan de renovación del material rodante de Renfe, que contempla la incorporación de trenes propulsados por energías alternativas dentro del compromiso de descarbonización de las energías destinadas a la tracción ferroviaria.

Prueba piloto

El acuerdo prevé el desarrollo de la prueba piloto en la primera quincena de diciembre con motor GNL en un tren autopropulsado del parque diésel de Feve (2600) en un tramo de unos veinte kilómetros entre las estaciones de Trubia y Baiña, con extensión a Figaredo, en Asturias. Para ello, se sustituye el motor diésel de una de las dos unidades automotoras pareadas por otro que consumirá gas natural para su propulsión y se instalarán los depósitos en los que se almacenará el GNL junto con los elementos auxiliares necesarios.

La prueba permitirá contrastar los resultados obtenidos tanto para tecnología diésel como para la de gas, ya que se mantendrá una cabeza tractora con cada tipo de combustible en el mismo tren. De esta prueba en vía se extraerán conclusiones sobre requisitos técnicos de espacio, peso, refrigeración y autonomía para la tracción de gas natural, además de otras consideraciones y variables comparativas en emisiones y economía operativa.

Como parte del proyecto, Renfe trabaja para implantar GNL a una serie de trenes para el servicio de Cercanías de Asturias de manera pionera en Europa.

Entre las ventajas que puede tener el uso del gas natural como combustible ferroviario destacan la reducción de la contaminación medioambiental, al disminuir las emisiones de óxidos de nitrógeno, óxidos de azufre, particulas y monóxido de carbono, así como la de la contaminación acústica y los gases de efecto invernadero, además de abrir opciones ante posibles nuevas exigencias ambientales en el sector.