(20/12/2013) Iniciado a finales de 2012, el proyecto fue seleccionado para su puesta en marcha en la convocatoria Innpacto 2012, del Ministerio de Economía y Competitividad. Cuenta con un presupuesto total de 1.486.597 euros y se desarrollará hasta 2015.
Su objetivo es el desarrollo de un balasto pesado a partir del diseño de un hormigón con residuos de alta densidad reciclados, que mitigue el problema del vuelo de balasto en vías de alta velocidad.

La solución definida es la prefabricación de piezas de hormigón de alta densidad a base de residuos sólidos pesados, para simular las características y prestaciones del balasto natural, pero dotando al elemento de un mayor peso.

El consorcio está llevando adelante dos líneas de trabajo diferenciadas, la obtención de la densidad y forma óptima de las partículas, y el desarrollo del hormigón pesado.

La metodología de prefabricación empleada, permite ofrecer un tamaño y morfología granular cuyo comportamiento hace que mejore respecto al balasto natural, que pueda ser bateado y ofrezca las prestaciones técnicas adecuadas para la explotación de una línea de alta velocidad.

Su ubicación en la infraestructura ferroviaria sería la zona superior del lecho de balasto, la zona susceptible de sufrir el fenómeno del vuelo de balasto, y con un espesor variable.

Ventaja medioambiental

Adicionalmente, esta solución añade una componente medioambiental a la construcción o renovación de líneas de alta velocidad, al valorizar en su fabricación residuos de alta densidad procedentes de diversos ámbitos industriales como la siderurgia o la construcción.

El nuevo balasto pesado presenta la misma facilidad de puesta en obra que el balasto convencional y puede ser utilizado en la renovación de vías existentes o en la construcción de nuevas.