Cookie Consent by FreePrivacyPolicy.com Entran en servicio los trenes Francilien en la línea P de cercanías de París

Material:  Noticia de actualidad


Bombardier suministra a SNCF, 172 de estos trenes por importe de 1.850 millones de euros

Los nuevos trenes Francilien, han entrado en servicio en la línea P de las cercanías de París entre Paris-Este y Meaux. Que recibirá este año un total de diecinueve unidades de esta plataforma construida por Bombardier en su factoría francesa de Crespin.


Entran en servicio los trenes Francilien en la línea P de cercanías de París
 
 
 

(04/03/2013) Desde el pasado mes de diciembre Francilien reemplazaron a los viejos "Petits Gris" (ver noticia) de acero inoxidable en la línea H que sirve la zona norte de la conurbación parisina con una frecuencia cada veinte minutos. En 2015 habrá 35 de estos trenes en servicio en la línea P.

Los Ferrocarriles Franceses y el sindicato de Transportes de la Región de París firmaron con Bombardier en 2006 un contrato por importe de 1.850 millones de euros, para el suministro de 172 de estos trenes, con una opción por doscientas unidades más. Hasta la fecha, Bombardier ha entregado 87 Francilien a SNCF, de los que 82 están en la línea H, cuatro en la P y uno hace sus pruebas en Saint Lazare.

Tras las pruebas, en el último trimestre de este año comenzarán a desplegarse en las líneas L y J de la red que parten de París Saint-Lazare y enlazan con la Universidad de Nanterre. Posteriormente, desde 2014 y 2015, servirán las líneas París-Ermont y París-Pontoise por Conflans.

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Los trenes

Los Francilen, unidades de 114 metros de longitud y pasillo continuo, ofrecen asientos y pasillos más anchos, calefacción en el suelo y aire acondicionado, grandes vestíbulos, sin recovecos ni armarios en los compartimentos de viajeros, y espacios para sillas de ruedas.

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Sus coches son más anchos, 3,06 metros que los trenes clásicos de la Región de París, gracias su menor longitud, 13,24 metros frente a los entre veinte y veintisiete de los vehículos clásicos. Las puertas de acceso de dos metros de ancho permiten el paso de tres personas simultáneamente.

El suelo está a 97 centímetros sobre el carril y bajo é s sitúa la mayor parte de los equipos. Los asientos tienen 49 centímetros de ancho frente a los 45 de los clásicos y están separados entere filas por diez centímetros más

Interiorismo

Con paneles antivandalismo y el mínimo de obstáculos en el suelo –lo asientos cuelgan de las paredes de los coches- sus interiorismo ha sido diseñado por el artista Yann Kersalé que ha incluido puntos de luz incluso bajo los asientos. Toda la iluminación del tren es mediante leds.

En el interior el nivel de ruido es muy reducido, no supera los 68 decibelios a la velocidad máxima de 140 km/h, gracias a motores más silenciosos y a un aislamiento acústico reforzado

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Motorización

El tren cuenta con motorización en cinco de sus nueve bogies, que se convierten en ocho, también con cinco motores, en el modelo corto que servirá las líneas de París-Saint-Lazare, y con sistema de recuperación de energía del frenado.

El consumo energético es 20 por ciento inferior al de los trenes a los que está reemplazando gracias a esa recuperación durante el frenado y a que su climatización se modula en función del número de viajeros. Éste es el primer tren francés íntegramente iluminado por leds de bajo consumo, la octava parte, y mayor vida útil, cinco o seis veces más, que los tubos flourescentes.

Información y seguridad

Dispone de sistemas de autodiagnóstico con información tiempo real al conductor y la base de mantenimiento, y permite al conductor rearmar la señal de alarma –el 99 por ciento de las que se producen en la red parisina son injustificadas- sin abandonar la cabina y evitando perder entre cinco y diez minutos en el proceso. En un Francilien, el conductor ve en una pantalla quien ha activado la alarma y los segundos anteriores a la acción.

El tren cuenta con dieciséis paneles de información sobre el servicio y sus incidencias, dos por coche, junto a las puertas, y dos más en los extremos cada vehículo para la emisión de información local, lo que suma un total de 32 pantallas por tren. Dieciséis cámaras vigilan el interior del tren. Las imágenes se graban y se mantienen archivadas durante 72 horas, salvo si se ha registrado algún incidente.