Cookie Consent by FreePrivacyPolicy.com Aportación militar a los ferrocarriles españoles

Portada:  Contenidos de la hemeroteca



(08/01/2003)   Aportación militar a los ferrocarriles españoles

Aportación Aunque en la historia de la humanidad lo militar ha tenido siempre una importancia crucial en el devenir de los acontecimientos, ciertamente parece que hoy día esa preponderancia ha ido perdiendo relevancia, o al menos de forma aparente. En los ferrocarriles, casi desde el mismo momento de su nacimiento, los militares encontraron una herramienta logística de extraordinaria importancia, especialmente para el transporte rápido de armas y equipos allá donde se estimara necesario. Esa relevancia táctica ha ido perdiendo papel con el paso de los años y hoy, sin haber sido desestimado, ha quedado un tanto relegado gracias a la mayor capacidad logística de otros medios de transporte terrestres.

Esta historia, de manera mucho más desarrollada como se puede suponer, es la que cuenta el General Luis Sequera, mando del Servicio Militar de Ferrocarriles, en su obra sobre la participación del ejército español en el devenir ferroviario nacional. De hecho, el autor quiere con este libro redimir a las tropas ferroviarias del lamentable olvido que ha habido de ellas a lo largo del tiempo, considerando éste que ha sido muy importante, sobre todo en el apartado de los "prácticos" ferroviarios.

El libro comienza con una presentación del papel del ferrocarril en la lógica de la defensa, siendo quizás ésta una de las partes más interesantes del trabajo. Tras esta presentación general, el libro analiza pormenorizadamente la evolución de los cuerpos de ferroviarios militares en el seno del Ejército Español, desde la creación de la primera unidad en 1872 hasta su última remodelación en 1999. Sucesivos capítulos van analizando detalladamente diversas facetas de este mismo tema hasta desembocar en un análisis comparativo con los casos de otros cuerpos en estados de la Unión Europea.

También se estudian casos singulares, como los algunas personalidades relevantes que formaron parte de este cuerpo (por ejemplo, el Coronel Alejandro Goicoechea, inventor del TALGO) o de realizaciones singulares de esta tropa. Un aspecto analizado con mucho detalle es el de la evolución de los "prácticos" ferroviarios, soldados que tras su licenciamiento han constituido, en cierto modo, la "espina dorsal" de las plantillas de las empresas ferroviarias nacionales. También se han analizados aspectos tan espinosos como la participación de estas unidades militares para mantener el servicio ferroviario en casos de huelgas, circunstancia que se han repetido a lo largo de la historia hasta no hace muchos años.

Todos los capítulos se acompañan con un anexo de notas, alguno de los cuales tiene casi más desarrollo que el capítulo al que apoyan, por lo cual no merece la pena pasarlos por alto sin más. Cierra la obra un atractivo capítulo de fotografías de este tema, desde los primeros ferrocarriles en la colonia de Cuba hasta la última instalación construida para estos fines: el ramal militar zaragozano de San Gregorio.

En el apartado de las contras hay que indicar que el libro presenta una estructura un tanto caótica, con una amalgama de apartados que dificulta seguir un poco el discurso general de la obra. Además, aquellos que no han participado en la disciplina militar, tendrán dificultades para entender muchas de las referencias de la obra que apelan a la estructura orgánica del ejército. Es una obra que interesará especialmente a todos aquellos que han formado parte de este cuerpo a lo largo de su dilatada historia y, para el resto los interesados en el mundo del ferrocarril, permitirá descubrirles algunas facetas insospechadas de este ámbito castrense sobre raíles.

Nota: Los libros que se reseñan pueden consultarse en la Biblioteca de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles. Teléfono: 915 277 055.