(02/02/2021)  

Este sistema que contribuye a disminuir el riesgo de contagio entre pasajeros, se ha realizado, en una primera fase, en 350 tornos de acceso a los trenes del Área Metropolitana de Buenos Aires. El sistema bloquea los tornos automáticamente cuando se detectan temperaturas corporales superiores a las indicadas como saludables o cuando intenta entrar una persona que no lleva puesta la mascarilla de forma correcta.

La solución tiene conexión directa con la base de datos de Trenes Argentinos para el chequeo del código QR necesario para acceder en hora punta y limitado a trabajadores considerados esenciales. El sistema de Indra permite confirmar la reserva de billete en caso de horario de máxima afluencia y corroborar si se trata de personal esencial o no, denegando o permitiendo el paso.

Funcionamiento

La solución solicita al viajero que muestre su reserva a una tableta situada en la parte superior del torno luego le pide situarse a unos cincuenta centímetros del dispositivo, que mide su temperatura y comprueba la correcta utilización de la mascarilla, mediante tecnología que combina reconocimiento facial con imágenes térmicas y de luz visible con controles de temperatura ultrarrápidos.

Finalmente, le permite el abono del pasaje con la tarjeta Sube y el paso. Además, da alertas sonoras de acceso habilitado o denegado junto a una ayuda visual para personas con deficiencia auditiva. El dispositivo tecnológico permite controlar las medidas de seguridad en otras terminales de transporte, aeropuertos, hospitales, fábricas, escuelas o edificios comerciales.

Tecnología

La tecnología de Indra integra el sistema validador del torno con su respectiva tableta, los concentradores de estación y los switches. El sistema incorpora un sensor de temperatura infrarroja con tecnología de imagen térmica, que captura diferentes niveles de luz infrarroja y actúa como un termómetro automático sin contacto, con un máximo de 10.800 puntos de medición y capaz de detectar diferencias de temperatura de hasta 0,3 grados centígrados y seleccionar automáticamente la temperatura más alta.

El sistema combina, además, las imágenes térmicas con la tecnología de vanguardia de luz visible, por lo que la velocidad aumenta de los cuatro fotogramas por segundo que ofrece la tecnología infrarroja ordinaria a los veinticinco.

También está equipado con el último algoritmo antifalsificación para el reconocimiento facial, contra casi todos los tipos de ataques de fotos y videos falsos. La tecnología de imagen térmica adopta una cámara gran angular que es adecuada para el control de personas de alta y baja estatura.