Cookie Consent by FreePrivacyPolicy.com Vapor español

Aficionados:  Contenidos de la hemeroteca


En 2007 habrá vaporosas de Renfe

Locomotoras diesel y eléctricas antiguas y modernas, automotores y unidades eléctricas, coches de caja de madera y trenes de alta velocidad; todos estos tipos de vehículos han servido de inspiración a los fabricantes de trenes miniatura dedicados al mercado español pero, pese el notable incremento de modelos ferroviarios españoles que se ha producido en los últimos años, los aficionados siguen esperando una reproducción auténtica y de calidad de una locomotora de vapor. La casa Piko presenta una locomotora 040 alemana con decoración e inscripciones de Renfe pero sin incorporar ninguna modificación.


(08/01/2007) 

Desde los inicios de la historia del modelismo ferroviario en España, todas las marcas han tratado de incluir en su catálogo referencias de locomotoras de vapor que, por diversas circunstancias, no han llegado a satisfacer plenamente al sector más amplio de los aficionados, estando todas ellas actualmente descatalogadas.

Locomotora 040-2438 de Piko
A
Las veteranas versiones de Paya no pasaban de juguetes que, en algunos casos, incorporaban algunos rasgos casi anecdóticos. Con más rigor, la reducida producción de otras marcas como Josfel o Viquim, corresponde a un periodo muy antiguo con unos criterios diferentes y alejados de los actuales. La popular 120 de Electrotren, con una excepcional capacidad de arrastre, ha sido durante muchos años el único ejemplar disponible, pero su pequeño tamaño solo la hacía adecuada para maniobras o para remolcar trenes locales.
Modelo de Payá de los años 50 inspirado en la Santa Fé
A
Ibertren también contó con una 020 y la elegante 1600 de MZA, pero el incomprensiblemente inadecuado acabado de estas referencias y su mínimo grado de detallado hacen que se trate de piezas poco cotizadas. Aunque de una forma totalmente al margen de la actividad modelística, puede mencionarse por lo anecdótico, la aparición de una reproducción de la locomotora “Tarraco” de la serie 030-0203/0207 de Renfe, de origen desconocido y fabricada totalmente en plástico, incluidos ejes y ruedas, pero con un grado de detalle muy aceptable.
La 120 de Electrotren
A
Este modelo, de muy escasa difusión, podía encontrarse en jugueterías, tiendas de golosinas e incluso puestos callejeros, para asombro de los afortunados aficionados que la encontraron. Años más tarde, Mabar ofrecía una reproducción en metal de esta locomotora quizá fabricada en base a este extraño modelo.
La "Cuco" de Ibertren
A
Probablemente, Comercial Brit-Line ha sido hasta ahora la empresa que más ha facilitado a los aficionados españoles la posibilidad de disponer de una locomotora de vapor Renfe con un nivel de rigor aceptable, con la distribución de kits de montaje fabricados en Gran Bretaña por Keyser y, posteriormente,
"1600" de Ibertren
A
Model Loco, de modelos como la “Mataró” 111, la “Mikado” 141-2101/2125 y 141-2201/2417, la “Confederación” 242-2001/2010 o la “Bonita” 241-2201/2257, así como la 030-2224/2230 ex-Norte. El inconveniente de estas piezas es que, además de que su precio era algo elevado al tratarse de series bastante cortas, el montaje no estaba al alcance de cualquier aficionado, requiriendo una cierta experiencia para ajustar y pintar las piezas, en su mayor parte, de metal de bajo punto fusión (Zamac).
Los primitivos modelos de Payá en escala H0 no eran reproduciones de ninguna serie concreta
A
La alternativa artesanal tampoco ha sido muy abundante ya que fabricar un modelo de locomotora de vapor en latón es bastante complejo, pudiéndose mencionar los casos del material de Forné, distribuido por Mabar y sobre todo de ATF, con una considerable producción y experiencia en este tipo de material. Evidentemente, el desarrollo y montaje, totalmente a mano, de una de estas locomotoras es muy laborioso, por lo que su precio no está al alcance de la mayoría de los aficionados.
Nuevo Pegaso 6038 de Modeltrans
A
A principios del año 2006, por fin se produce la esperada noticia y, casi de forma simultánea, se difunden oficialmente las intenciones de Electrotren Y Mabar Modelismo de incluir en sus catálogos sendos modelos de locomotoras de vapor exclusivamente españolas y fabricadas con los criterios de calidad y fidelidad actuales. En ambos casos,
La marca española de Jyesa nunca se inspiró en locomotoras de Renfe
A

las piezas elegidas son de las más representativas y características del parque de español (las “Mikados” 141-2101/2125 y 141-2201/2417 y las “Renfes” 240-2471/2717), generándose la lógica expectación. Estas nuevas referencias se anuncian para el año 2007, por lo que el tiempo de espera para los aficionados que llevan muchos años anhelando una locomotora de vapor española se hace muy largo.

Primer vapor

Mientras tanto la marca Piko, a través de su representante en España, anuncia en algunos medios la inminente presencia de un nuevo modelo bajo el titular “El primer vapor español”.

Kits de montaje de metal blanco de Model Loco
A
Este mensaje se presenta sobre lo que parece ser una zona del lateral de un tender real, lo que supone un fondo prácticamente negro, sin indicación alguna sobre el modelo reproducido o características del mismo.
De esta forma, toda la precampaña se realiza rodeada de cierto misterio, creando una expectación que, en algún momento, hace pensar que Piko, basándose en alguno de sus bastidores existentes, ha desarrollado unos moldes específicos para una locomotora de Renfe. Finalmente, se produce la presentación y comercialización del modelo.
030 Bourbonais de Rivarossi con placas Renfe artesanales
A
A quienes tengan la oportunidad de contemplar por primera vez esta locomotora circulando en una maqueta, probablemente esta pieza les cause una excelente impresión, tanto por el aspecto general como por su suavidad de marcha.
En cambio, los que hayan analizado el modelo junto a una fotografía o un plano de la máquina original (040-2483 o alguna de sus “hermanas” de serie) o, simplemente, mantengan en la memoria la imagen de esta locomotoras de Norte, se habrán sentido decepcionados, ya que el parecido con el modelo en miniatura de Piko se limita al número de ejes y a las placas de numeración, ya que se trata de una “Prusiana” G7-1 decorada con matrículas Renfe que, al igual que la serie de la Compañía del Norte 2651/2682, posteriormente Renfe 040-2471/2502 fueron fabricadas por Hartmann en su factoría de Chemnitz.
La elegante estampa de la prusiana de Piko no tiene muchos elementos comunes con ninguna locomotora española
A
Las locomotoras de vapor tienen varios elementos o grupos de elementos que marcan su “fisonomía”. Entre ellos, además de la disposición de ejes, destacan la forma y colocación de la chimenea, domos y areneros, la forma de la cabina y la ubicación de las ventanillas, la situación, altura y diámetro de la caldera, la distribución mecánica y, fundamentalmente, el conjunto de todos estos rasgos para que, al igual que con una cara humana, pueda establecerse un parecido. En el caso de la locomotora de Piko, ninguno de estos rasgos coinciden y si se tratara de un retrato, podría decirse que ha quedado guapa pero que no se parece en nada.
Detalle de las placas
A
Ante estos hechos, seguramente que los aficionados van a reaccionar de formas muy diferentes en función de los criterios que cada uno aplique a la selección del material de tracción. Evidentemente, quienes busquen por encima de todo el rigor con el original no se sentirán muy atraídos por esta referencia de Piko, pero quizá también habrá aficionados que, ante la ausencia de alternativas, solo busquen poder ver circular por su maqueta un modelo atractivo que evoque la imagen de una locomotora de vapor de Renfe, arrastrando una composición de coches de madera o vagones de mercancías unificados.
El ténder aloja el motor y la transmisión
A
Para estos últimos, este modelo puede aportarles grandes satisfacciones ya que, al estar ubicada la motorización en el tender, se dispone de suficiente espacio en el interior de la locomotora para instalar fácilmente un decodificador digital con módulo de sonido, así como un equipo fumígeno. Además, admite circulación por curvas de radio 358 mm (R1) y, en general, las tonalidades y texturas de la pintura son muy acertadas.
La locomotora y el ténder están permanentemente unidos para el paso de las conducciones
A
Este modelo corresponde a la denominada “Serie Hobby” de Piko, destinada fundamentalmente a cajas de iniciación, tratándose de una pieza con un precio sensiblemente más asequible que otras referencias de gamas superiores, lo que también abre unas interesantes posibilidades a los modelistas artesanos para poder contar con una motorización fiable y un rodaje 040 para acometer la construcción de alguna de las numerosas series de locomotoras españoles con esta disposición de ejes. (En el álbum del parque motor de Renfe de 1942, figuran nueves series de locomotoras 040 con tender de tres ejes).
Una vez desvelada la misteriosa pre-campaña de Piko, la conclusión puede ser que “el primer vapor español”, todavía está pendiente de llegar.