La 440-096 en uno de sus viajes a Sigüenza. Foto Javier Rodríguez Olmo

(18/04/2012) El Tren Río Eresma, que recupera el nombre de una antigua circulación de Renfe de los años 80, es un proyecto pilotado por la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Madrid, que plantea poner en marcha un tren histórico que podría circular con carácter regular a partir del tercer trimestre de este año. El debut de este tren se verificará este próximo sábado, en una prueba piloto que servirá además de presentación del proyecto a toda la sociedad. El tren que realizará esta circulación será la UT 440-196, el último ejemplar conservado en estado original de una de las más míticas series del ferrocarril español de la segunda mitad del pasado siglo, las 440, que llegó a contar con 255 ejemplares, los cuales realizaron servicios de todo tipo, básicamente Cercanías y Regionales en todas las líneas electrificadas de España. Muchas partieron a países con Chile o Brasil y otras han sido reconvertidas en UT de la serie 470.

Concretamente esta unidad, que data de mediados de los años 70, fue apartada del servicio en 2008. Un año después, tras haber perdido su coche intermedio en 2003, fue recuperada para la celebración del aniversario del servicio de Cercanías de Renfe, retomando sus colores originales. Actualmente está adscrita al parque del museo de Delicias, en colaboración para su mantenimiento y gestión con los amigos del ferrocarril madrileños, que la han estado manteniendo durante estos últimos dos años y ahora pasa varios meses al año bajo la marquesina del museo.

El tren Río Eresma 

UT en pruebas. Foto de Oscar López

Es la primera vez que una asociación plantea explotar un tren histórico de manera regular, y los aficionados madrileños defienden este proyecto porque recupera una sensación de viajar imposible en nuestros días, en un material que traslada a los viajeros al ferrocarril de dos, tres a incluso cuatro décadas atrás, cuando era posible abrir las ventanillas de los trenes y sentir el paisaje más vivamente, reencontrando aquellos asientos de eskay rojo y la potente calefacción de radiadores situadas bajo las ventanillas. Además, el itinerario discurre por parajes de excepcional interés paisajístico, como las laderas de la Sierra del Guadarrama, terminando en una ciudad Patrimonio de la Humanidad, lo cual añade un valor especial al viajero que quiera efectuar un recorrido en el tren. Esta asociación de Madrid ya tiene una experiencia de diecisiete años operando circulaciones especiales con material histórico, como por ejemplo su UT 435-005, la “suiza”, o las composiciones de coches remolcados por la 269-604, la Gata.

El viaje partirá el próximo sábado 21 de la terminal madrileña de Príncipe Pío a las nueve de la mañana, llegando a Segovia a las 11:30. La vuelta tendrá lugar a las 19:30 para llegar a Madrid a partir de las 21:20, entrando por Chamartín para terminar en Atocha.

El programa, que incluye una sorpresa que los organizadores desvelarán ese mismo día, comprende además una breve circulación para que los segovianos puedan conocer por si mismos el proyecto, limitada a la estación de El Espinar y retorno a Segovia, con salida a las 17,00 horas. Los billetes se podrán adquirir el mismo día en la propia estación de Segovia.

Este viaje servirá para presentar a la sociedad y medios el proyecto de tren, para lo cual se llevarán a esta terminal castellana unos coches‐restaurante de la década de 1920, en los cuales la Asociación expondrá en una charla informativa, junto a sus invitados, los detalles de esta iniciativa.

Los billetes para este viaje (que incluyen la visita al Alcázar) se pueden adquirir ya en la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Madrid, entrando en su página