(07/02/2023)  

El primer tramo discurría desde la estación de Jaume I hasta la de Joanic e incorporaba otras cuatro estaciones, General Mola, rebautizada Verdaguer en 1982, Girona, Gran Via hoy Passeig de Gràcia  y Urquinaona . Sólo cuatro de estas seis estaciones eran nuevas dado que una parte de la línea 4 utilizaba el antiguo ramal Aragó-Correus, de la línea 3 de metro, del que formaban parte las paradas de Jaume I y Urquinaona. La modificación significó el cierre de Correos, una estación que no se incluía en la ampliación de la línea 4 del plan de metro.

Inauguración

La inauguración llevó consigo un gran despliegue oficial aprovechando la visita a la ciudad del entonces ministro de Obras Públicas, Gonzalo Fernández de la Mora que realizó un largo recorrido por varios lugares de la red de metro y de ferrocarril. El séquito llegó a la estación Diagonal  después de visitar algunos de los lugares en obras, como las de la nueva estación de Sants que debía sustituir a la de Francia.

Precisamente en la Diagonal, se procedió a la apertura al público de una exposición de maquetas sobre los proyectos que contemplaba el plan de metros y otras infraestructuras ferroviarias previsitas para la ciudad. Visitada la muestra, la comitiva se desplazó hasta la estación de Jaume I para realizar el primer trayecto en metro de la nueva línea 4 hasta Joanic, para proceder a la inauguración oficial. 

A medio camino, visitaron la estación de Girona para contemplar un gran relieve cerámico de 12,5 metros cuadrados, de Àngel Orensanz instalado en el nuevo equipamiento, que tenía como motivo el paisaje del Ampurdán. Una vez inaugurada la línea 4, las autoridades visitaron otras instalaciones nuevas, entre ellas la de la estación de Renfe del Clot, recientemente abierta al público.

Pubilla Casas

Finalmente, la comitiva se trasladó a Hospitalet de Llobregat, concretamente hasta la nueva estación de Pubilla Cases, que entraba en servicio ese mismo día como parte de la prolongación de la línea 5. El nuevo tramo abierto, de poco más de un kilómetro, conectaba la estación de Collblanc, antes San Ramón, con la de Pubilla Cases.

Con esta ampliación la red de metro confirmaba su vocación metropolitana llegando a zonas que no pertenecían al término municipal de Barcelona, lugares que, habían experimentado un fuerte crecimiento urbanístico con la llegada de la inmigración desde otros lugares de España. Hasta ese momento sólo la estación de Santa Eulalia de la línea 1, abierta en el año 1932, estaba situada fuera de Barcelona.